por Maylin Ortega Zulueta; Habana, 2000
La música de fondo era un son,
cantado con jadeos cadenciosos.
Los miembros del Septeto Lujurioso,
se alzaban en brillante ejecución.
Entre piernas de labor apuro dedos,
la membrana excitada respondió.
Al contacto de manos agitadas,
percutían el cuero del bongó.
Cuando habían transcurrido unos compases,
se empezaba a poner caliente el son.
Es que el cuello ardía con las frases,
de un violín, cuerda y arco en frotación.
Las manos hacían con buen gusto
mover las maracas en el sostén.
La guitarra comprimía todo el pecho,
haciéndole saltar en el vaivén.
Movimientos digitales y de labios
provocaban un clímax colosal.
Se irguió la flauta, penetrando majestuosa
los registros de la escala natural.
A este punto de la timba en retirada,
el contrabajo su tumbao lo cambió.
Así en un guajeo lento y grave
diminuendo y en fade se acabó el son.
Maylin Ortega Zulueta es una cantante, compositora y profesora de canto y piano cubano canadiense. Actualmente está en cuarto año en la facultad de música de la Universidad de Toronto. Al terminar su programa el año entrante, obtendrá una Licenciatura en música en la especialidad de canto, y otro en Educación como profesora de español. Durante estos años de estudiante ha recibido dos becas por su buen desempeño: Albert and Wilhemine Francis en el 2011, y Arthur and Edward Redsell en el 2014.