Una aventura a través de la voz y la palabra

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Probablemente están preguntándose cómo la idea de Palabra & Voz nació.

Déjenme contarles de lo que pasó en una tarde soleada, una semana antes del principio del año académico. Estaba leyendo fuera de Victoria College cuando vi a las profesoras Laura Colantoni y Sanda Munjic marchándose de trabajo. Platicamos un rato y al final de la conversación, me avisaron que cualquier sugerencia que yo (u otro estudiante) tuviera para el departamento sería bienvenida – especialmente si era alguna actividad donde hubiera mayor participación de los estudiantes de licenciatura.

Al principio pensé que yo no tenía ninguna sugerencia que hacer, así que seguí leyendo. Dicho esto, en camino a casa, se me encendió la imaginación. Los estudiantes de posgrado tenían la publicación Apuntes Hispánicos donde compilaban sus trabajos académicos y creativos. “¿Y qué tenemos los de licenciatura?”, me pregunté. No teníamos nada más que las discusiones inspiradas en clase.

Teniendo en cuenta el talento y el intelecto mostrados regularmente en nuestro departamento (por los estudiantes de licenciatura), pensé que sería gracioso ocuparse con algo más allá del trabajo académico y crear un sentido de comunidad. “Un periódico,” pensé. Esta idea era valiosa y requería de mucho de responsabilidad y dedicación. Desde el principio, la desestimé porque conllevaba mucho compromiso, pero luego me pregunté “¡¿Por qué no?!”

Esa misma noche, les comuniqué mi idea a las profesoras Colantoni y Munjic. La sorpresa fue total cuando me respondieron con seguro entusiasmo y un vigoroso ¡adelante! La siguiente semana, nos reunimos y discutimos qué dirección este proyecto podría tomar. Una edición de papel estaba fuera de la discusión y quizá – así fue mejor.  Decidimos que un espacio virtual sería mucho más accesible y mucho más fácil de  mantener y compartir. Escribiríamos sobre las noticias del departamento, los eventos y las curiosidades culturales en el mundo luso e hispanohablante, y lo más importante: tendríamos dónde compartir nuestra escritura creativa. Hice unos bocetos para presentar mis reflexiones con más claridad y en poco tiempo, un correo fue enviado para convocar a los estudiantes de los programas de español y portugués a participar en este proyecto. Quería saber si había otr@s que compartirían mi entusiasmo (y mi visión) de juntar a los miembros de nuestro pequeño departamento y para crear algo fuera de las clases.

Antes de la primera reunión, estaba asustada. “¿Y si nadie viene?”, me pregunté. Para mi alivio, llegaron no una, no dos, sino, media docena de estudiantes. Compartí con ellos mi visión y luego estábamos pensando juntos en otras maneras para desarrollar el proyecto.

Mis colegas Elio B. Ramírez y Jaclyn Bucar hablarán más de lo tedioso que fue darle inicio a este proyecto. Fue difícil, pero lo que tenemos frente a ustedes está lleno de creatividad e inspiración. Hemos juntado nuestras palabras y voces en este proyecto; y ahora estamos impacientes para compartirlos con ustedes.

Quiero agradecer a la jefa del departamento, Prof. Laura Colantoni, y a la coordinadora de los estudios de licenciatura, Prof. Sanda Munjic, por su confianza inagotable en este proyecto que pareció ingenuo en el principio. Por su estímulo logramos embarcarnos en esta empresa. A nuestros redactores profesorales (Prof. Martha Bátiz, Prof. Hudson Moura and Prof. João Pedro Vicente Faustino): su tiempo y su conocimiento han sido invaluables; y a nuestros primeros siete contribuidores – gracias por ser los pioneros de Palabra & Voz.

Joana Milcheva


 Cuando recibí un correo electrónico de la profesora Sanda Munjic, coordinadora del programa de licenciatura del departamento de español y portugués, pensé que este proyecto sería una oportunidad para incrementar mi actividad extracurricular en el campus.  Punto. Quería que mi hoja de vida describiera que he estado escribiendo con mayor seriedad y responsabilidad.

Lejos de ello, nunca imaginé que nos tomaría el otoño entero para llegar a este punto: la publicación de  la primera edición de Palabra & Voz. Nuestra primera reunión fue a mediados de septiembre, cuando el sol todavía radiaba con el entusiasmo de junio. La reunión fue breve en donde ingenua pero valientemente decidimos embarcarnos en esta empresa.  Ambiciosamente planeamos esta primera edición, donde abordaríamos temas notables que podrían ser de mucho interés para los estudiantes de licenciatura. Nuestras mentes creativas nos habían invitado a soñar que  seríamos capaces sacar una edición mensualmente. Soñábamos que muchos estudiantes se unirían a nuestra causa principal: crear una comunidad estudiantil en el departamento.

Soñar no cuesta nada; hacer los sueños realidad cuesta un mundo. Después de nuestra primera reunión, y después de delegar algunas tareas para reclutar más estudiantes, no nos percatamos del torbellino de actividades académicas que nos pisaba la cola y, con la llegada de octubre, fuimos embestidos. Las tareas se apilaban, los correos y las invitaciones enviadas fueron poco correspondidas. El tiempo se nos deslizaba como las hojas de las arces se deslizan en el otoño. Hacia la tercera semana de octubre, decidimos reunir esfuerzos y replantear los objetivos de este proyecto. Simplificamos las tareas para ganar un poco de tiempo  y así enfocarnos en labores específicas.

Hacia principios de noviembre, pudimos recopilar nuestras primeras composiciones y las sometimos a un proceso minucioso de redacción. Con la ayuda de algunos profesores voluntarios, llegamos a redactar más de diez trabajos. En ese preciso instante, nos dimos cuenta de que el semestre ya estaba por terminarse y el trabajo de las tareas finales nos oprimían los esfuerzos.

Diciembre nos sorprendió – estábamos todavía haciendo trabajo de redacción y edición. A la vez, estábamos contentos de ver que nuestro trabajo ya tenía forma robusta y que era cuestión de un par de días para que fuera publicado en el portal del departamento. Ahora que ya está listo, espero que disfruten de nuestra aventura a través de la voz y la palabra.

Elio Ramírez


En la primera reunión de Palabra & Voz, me di cuenta – y no por la primera vez – que los estudiantes de licenciatura del departamento de español y portugués carecemos de solidaridad como cuerpo estudiantil. Al mismo tiempo, me di cuenta de que este proyecto nos presentaba la oportunidad para reunirnos a través de nuestros intereses y experiencias en común. No éramos muchos – ni siquiera llegábamos a diez personas – pero a todos nos gustó la idea del proyecto y nos emocionamos mucho con lo que podríamos lograr. Hablamos ambiciosamente del futuro lejano del proyecto y la posibilidad de colaborar con OLAS…en fin, nos dejamos llevar por el ánimo de esa primera reunión y salimos con ideas poco realistas. Creo que sobreestimamos lo que podíamos conseguir en un mes, además del nivel de compromiso que requería el proyecto.

Después de cuatro años de estudios en el departamento, y a pesar de haberme identificado con varios de mis colegas, se hizo evidente que nunca fomentamos, tangiblemente, un sentimiento de comunidad entre nosotros. Mi impresión se hizo realidad en la primera etapa del proyecto. Luego de la primera reunión, parecía que la mayoría de los interesados habían empezado a sentir el peso de sus propios trabajos y, efectivamente, desaparecieron de la escena. Elio me contactó hacia mediados de octubre para preguntarme si yo sabía algo del proyecto. Después de ponernos en contacto con Joana, nos dimos cuenta que éramos sólo tres y que el trabajo nos tenía reservados desafíos más grandes…

A pesar de las dificultades y los contratiempos, por fin hemos terminado la primera entrega de Palabra y voz. La presento aquí, por mi cuenta, sintiéndome orgullosa de nuestro equipo de trabajo, agradecida con los nuevos voluntarios que recientemente han colaborado, y con la esperanza que los demás os encontréis interesados en leer lo que producimos y en contribuir a la segunda edición. Siempre he sido una estudiante tímida, en cuanto a grupos y proyectos extracurriculares – a pesar de encontrarme interesada en muchas iniciativas tomadas en el campus, nunca tuve la confianza de involucrarme. Después del trabajo que hicimos este semestre, puedo dar testimonio del sentimiento de logro de haber colaborado exitosamente nuestras mentes y nuestros esfuerzos. Esperamos encontrar más estudiantes interesados, dentro e incluso fuera del departamento, con quienes podemos compartir este sentimiento de comunidad ☺

Parte de este proyecto era crear un espacio creativo en que los estudiantes de licenciatura del departamento puedan experimentar con sus capacidades intelectuales. Creo que cumplimos con esa visión. Con Palabra y voz podemos explorar nuestros pensamientos creativos y críticos, libres del estrés de los trabajos académicos. Aquí podemos informarnos e inspirarnos los unos a los otros y, a la vez, podemos practicar juntos el uso del español y del portugués. Aquí podemos compartir las experiencias culturales a las cuales estos idiomas nos han dado acceso. Aquí, dando voz a nuestras ideas a través de la palabra escrita, podemos construir una comunidad fundada en nuestros intereses en común. ¡Vámonos adelante! Embarquémos juntos en esta aventura a través de la voz y la palabra.

Jaclyn Bucar